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El control de las emisiones de gases a la atmósfera en cualquier proceso químico industrial, es fundamental para salvaguardar la seguridad de las personas que pueden ser afectadas por emisiones tóxicas o explosivas. Además de controlar los productos que se vierten a la atmósfera y que pueden contaminar o incumplir normativas medioambientales.
Las conducciones de gas de cualquier tipo, han de ser controladas cada cierto número de metros con válvulas de cierre por si hay un incidente. Hay que medir la presión en ellas, el caudal del fluido que contienen, a veces la temperatura, y sobre todo los posibles escapes o pérdidas no deseadas.
La medición de los hidrocarburos en agua, o el agua existente en el aceite o combustible o las características fisico-quimicas de aceites o combustibles y el análisis de sus degradación con el uso, son procesos fundamentales en muchas industrias y necesarios para los departamentos de mantenimiento.
La seguridad de los operarios cuando están realizando tareas en zonas potencialmente peligrosas, debido a los posibles gases tóxicos o explosivos, es una tarea encomendada a los detectores de Gases. Los tenemos portátiles o fijos.
En el transporte del agua limpia o sucia, las estaciones de bombeo han de producir la presión necesaria y están equipados con sensores que la controlan de forma contínua.
